¿Cómo consolidar la memoria?

Por: Paloma Valenzuela

La neurodidáctica

Desde los primeros descubrimientos de Ramón y Cajal a principio del siglo XX hasta los experimentos más modernos con DBS1 ; conocer cómo funciona el cerebro humano nos ha ayudado a mejorar procesos de enseñanza-aprendizaje, así como mejorar la salud mental en general.

Tener conocimiento sobre el procesamiento de la información y dilucidar cómo aprendemos, es esencial en nuestro rol docente.

El proceso de aprendizaje tiene los siguientes elementos:

Como se puede observar, el punto de inicio es la motivación, que propicia el aprendizaje, puesto que motiva al estudiante a terminar la tarea y, por supuesto, a poner atención; que es el segundo paso. La atención, por su parte, pone el foco y prepara al cerebro para que la información, que entrará a través de los sentidos, se registre en la memoria de trabajo. El cuarto y quinto punto, es el traspaso de la memoria de corto plazo a la de largo plazo; lo que, finalmente, se considera como un aprendizaje o transferencia.

La memoria

El aprendizaje implica un cambio duradero en la conducta; lo que se logra cuando el organismo codifica, almacena y recupera información del pasado. Por ello es tan relevante que consideremos qué estrategias estamos usando para consolidar la memoria, ya que no puede existir aprendizaje sin ella.

Cabe destacar que la memoria es selectiva y la emoción mejora el recuerdo; por lo que los elementos emocionales son vitales para evocar la información que el estudiante necesite en el momento preciso.

A continuación, veremos siete pasos para consolidar la memoria de largo plazo, de acuerdo a lo propuesto por Robert Rosler.

1. Abrir las memorias sensoriales.

Como ya vimos, la memoria y atención son imprescindibles para que el estudiante pueda registrar adecuadamente la información que obtiene a través de sus sentidos.

Usar la novedad libera noradrenalina, que despierta y acelera el cerebro.

Es muy importante crear conexiones rápidas con sus conocimientos previos (anclaje).

Recomendaciones: Se pueden usar: tráilers, imágenes, videos, silbatos, etc. Así como mantener el cambio (para mantener la novedad y, por lo tanto, la atención) en la voz, lo visual y lo kinestésico (mover a los estudiantes, mover la estructura de la sala o moverte tú). Finalmente, siempre ayuda que los estudiantes puedan resumir la información de la clase en un organizador visual. Por una parte, porque recordamos mejor lo gráfico y, por otra, porque así el estudiante tendrá dos formas de acceder a esa información.

2. Hacer pensar.

En este paso, se trabaja la memoria de trabajo, es decir, la información que ven en clases, la ejercitan. Es muy importante que no estés entregando una información de manera extensa. En otras palabras, cuando planifiques tu clase, ten en consideración dar una información (en no más de 5 minutos) y que los estudiantes tengan tiempo para procesar esta nueva información. 

Recomendaciones: Estilo socrático, burbujas de información (en una clase invertida, por ejemplo), ver un video informativo (y que después lo expliquen con sus palabras).

3. Recodificar.

Recuperar la información de la memoria a corto plazo y poder trabajar sobre ella. 

Una vez que entregaste la información, planifica cómo los estudiantes la guardarán en su memoria a corto plazo. Cabe destacar que el material autopensado es mejor recordado, por ello es mejor si organizan lo aprendido de manera colaborativa.

Recomendaciones: clasificar, resumir, ejemplificar, comparar, explicar, etc.

4. Fortificar.

Evaluación de lo aprendido. Planifica un estilo formativo, con un feedback inmediato. De esta manera, el estudiante conocerá su proceso, caerá en menos errores y bajará la ansiedad y frustración.

La retroalimentación permite cambiar la comprensión conceptual y hacer los cambios en la memoria de trabajo antes de que quede mal en la memoria de largo plazo. (Desaprender es aún más difícil que aprender, así que planifica espacios de retroalimentación).

Recomendaciones: Trabajar con pautas, rúbricas o portafolios, en donde los estudiantes conozcan, desde un principio, lo que se espera de ellos y la tarea. 

5. Practicar.

Volver a trabajar con todas las memorias. La información debe ser representada de distintas formas para que sea almacenada en distintas áreas cerebrales.

Recomendaciones: Repetir los conceptos clave con un video, canción, diagrama, dibujo, etc.

6. Repasar y recordar.

Recuperar y manipular la información en la memoria de trabajo. Así se evita la poda neuronal.

En este paso, es importante que alcances los niveles cognitivos más altos, por ello planifica posibilitar la evaluación y la creación (como habilidad).

Recomendaciones: Preguntar la opinión de los estudiantes (desde distintos puntos de vista), debatir, crear maquetas, videos, historias, grabaciones, exposiciones, etc.

7. Recordar.

Se recomienza con el paso 1.

Consideraciones Finales

Como ves, no es tan lejano de lo que usualmente haces, pero recuerda gestionar bien los tiempos, para darle a cada uno de estos pasos la importancia que tienen. Por ejemplo, no olvides planificar tiempo para que los estudiantes piensen y recodifiquen la información; darle importancia a la retroalimentación formativa y no solo al final de una prueba o de una unidad; y no olvides que siempre recordaremos mejor aquello que nos evoca alguna emoción.

1 Deep brain stimulation: es una inserción neuroquirúrgica de electrodos para estimular ciertas áreas del cerebro. Se ha usado, entre otras cosas, para curar los síntomas de la depresión. Puedes ver este video: https://www.youtube.com/watch?v=XCY8uQr2LKo

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